A veces, desearía vivir en una cabaña de madera, aislada, en el bosque, cerca de un rio, en medio de la naturaleza, sin electricidad ni tecnología, sin objetos que no provengan directamente de la naturaleza misma, cazando, cosechando y cortando leña para calentarme en invierno. Entonces, oiría hablar de ciudades donde la gente vive en casas y edificios con calefacción y aire acondicionado, con transportes para ir a cualquier parte, gente que tiene acceso a cualquier tipo de comida de cualquier parte del mundo casi al instante, con aparatos para comunicarse, escuchar cualquier música cuando y donde uno quiera, y para ver imágenes de otras partes del mundo, de cómo viven los demás.
Entonces desearía todo eso, e iría a una ciudad. Conseguiría un trabajo para alquilar una casa climatizada, un vehículo, toda esa comida al alcance de la mano, y uno de esos teléfonos, para hablar con todo el mundo, escuchar toda esa música, ver cómo viven los demás, y desear vivir como ellos, en una cabaña de madera, aislada, en el bosque, cerca de un rio, en medio de la naturaleza, sin electricidad ni tecnología, sin objetos que no provengan directamente de la naturaleza misma, cazando, cosechando y cortando leña para calentarme en invierno.